En medio de un entorno global competitivo e inestable son muchos los profesionales que deben asumir la reinvención, como el salvavidas para mantenerse a flote cuando la marea de la incertidumbre y la transformación crece en diversos sectores empresariales y de negocio.
Hoy es una obligación rentabilizar el talento y experiencia personal, lo cual pasa por mantenernos en un estado beta continuo; actualizándonos, obteniendo y generando conocimiento de manera integral, pero -lo más importante- sobre un área determinada.
No se trata de saber de todo, no se trata de ser -como dice una frase que escuché por primera vez en la Escuela de Periodismo de la Universidad Central de Venezuela- un océano de conocimiento con un centímetro de profundidad.
Para mí, lo más inteligente que podemos hacer los comunicadores y periodistas es “integralizarnos” con un enfoque claro en cuanto a un área, sector o una disciplina.
Como saben, soy titulado en periodismo. Desde hace más de cinco años, cuando hablo con colegas de diversas latitudes el lugar común es la “actual exploración de nuevas oportunidades; que en algunos casos no es una simple etapa, sino que forma parte de un proceso frecuente”.
Creo que el principal error de muchos colegas es tener una mirada instrumental e incluso reduccionista de nuestra profesión. Limitamos nuestro rol a los verbos escribir, editar, ejecutar, investigar y publicar.
Desde hace tiempo los comunicadores hemos perdido terreno en áreas como el Marketing, la Publicidad e incluso la Comunicación Corporativa, debido a que asumimos nuestro rol como simples ejecutores.
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Debemos cambiar “la comunicación” y los verbos
Nuestra profesión evoluciona tan rápido como la sociedad y los mercados; los comunicadores estamos llamados a promover el proceso de transformación, más que a victimizarnos ante éste.
Tenemos que apropiarnos de nuevos verbos como diagnosticar, estrategizar, planificar, gerenciar, impactar, transformar, persuadir, analizar, capacitar, asesorar, entre otros.
Nuestra formación base -en conjunto con alguna especialización, certificaciones y una constante actualización autodidacta- nos permite tener las herramientas y conocimiento necesario para liderar procesos de cambios, potenciar modelos de negocios, gestionar la confianza dentro y fuera de las organizaciones, y responder de manera asertiva y efectiva ante crisis, que incluso podríamos anticipar.
La comunicación es un proceso clave para lograr resultados organizacionales, comerciales, empresariales ¿Tienes dudas de esto? Te invito a leer cualquier libro de gestión, gerencia y liderazgo nuevo o viejo, en cualquier idioma, con cualquier orientación o visión teórica.
En el mundo actual se necesitan liderazgos que ayuden a las organizaciones a cumplir con una mayor cuota de responsabilidad, transparencia, solidaridad, conexión con la realidad, empatía y coherencia que exige el mercado. Y un (a) profesional (o un equipo) de comunicación puede acompañar y hasta liderar el logro de estos objetivos.
¿Cómo podemos hacerlo?
Hace unos cuantos años escribí en este mismo blog “Las cualidades esenciales del comunicador corporativo”; que aún siguen vigentes, pero es necesario ir más allá. En las empresas tenemos la oportunidad para destacar cuando:
- Respondemos ágilmente.
- Mantenemos un pensamiento estratégico.
- Gestionamos relaciones.
- Anticipamos crisis y riesgos.
Los analistas, especialistas y directores de comunicaciones en las empresas tienen retos diarios, cotidianos, que van más allá de establecer, implementar y medir un plan de comunicaciones.
Te comparto una publicación de Hill+Knowlton Strategies que destaca ese papel de liderazgo que estamos llamados a ocupar.
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En una próxima publicación te hablaré de las áreas del conocimiento imprescindibles para ser HOY un comunicador competitivo.
Aclaratoria esencial
Esto no es un manifiesto para la reivindicación de los comunicadores en el mundo corporativo; nada más alejado de la realidad. Esto es una invitación de un comunicador (por profesión, de acción y pasión) a otros, para ganar y reconquistar espacios profesionales.
¿Eres comunicador?
¿Cómo te sientes con esta reflexión?
¿En qué lugar o momentos te encuentras?
¿Te aporta algo esta publicación?
Si la respuesta es un rotundo sí, compártela con tus colegas; si tu respuesta es no; me interesa saber tu visión, hay una buena oportunidad para el debate.
Éste es un espacio, donde el conocimiento y aprendizaje colaborativo son protagonistas.
10 Responses
Excelente, lo primero es formación y luego acción. Soy una apasionada de las Comunicaciones Corporativas, y hoy en día cada vez más, fortalecen los planes y acciones de las personas y de las empresas.
Una formación que es continua, toda la vida Omaira. Gracias por estar en este espacio que retomé hace unos meses, te invito a hacerlo 100% tuyo. Un abrazo.
Gabriel, vas por el buen camino en las inquietudes que planteas. La comunicación corporativa tiene que ir por delante de los cambios que el adelanto tecnológico le imprime al mundo empresarial, de lo contrario no podemos responder con la eficiencia correspondiente. Deseo que no abandones esta senda, que como tu señalas da para el debate y la transformación adecuada al mundo que nos espera.
¡OMARCITO! Qué gusto leerte por acá, gracias por tu contribución. Celebro las coincidencia y más que abandonar nos seguimos sumergiendo en esta área tan apasionante, espero seguir contando con tu presencia por esta vía: me hace feliz. Un abrazo gigante (extracaluroso).
Hola Gabriel,
Además de estar de acuerdo con tu análisis, quisiera complementar con la idea de que los directivos y gerentes del negocio saben muy bien lo que quieren comunicar, pero no tienen por qué saber el cómo, cuando, a través de que, ni con quienes vincularse para cumplir con sus objetivos. Entender que la estrategia comunicacional es una bajada coadyuvante de la estrategia del negocio, requiere entender que debe ser gestionada por especialistas. La mirada precarizadora de la función de la comunicación corporativa llegó a su fin.
Hola Fran. Gracias por tu complemento, acertadísimo. Y me quedo con esta frase: “La mirada precarizadora de la función de la comunicación corporativa llegó a su fin”.
Como lo destaqué en el post, este contenido tiene una segunda parte, espero que entonces volvamos a coincidir. Un abrazo
¡Hola, Gabo!
Coincido con lo que planteas y, seguramente, también lo hagan quienes trabajan en comunicación.
Creo que el reto sigue estando en que estas reflexiones e ideas sean compartidas por quienes lideran las organizaciones, que muchas veces dicen coincidir, pero solo lo hacen desde el discurso ya que en la práctica son los primeros obstaculizadores. Ojo, es culpa nuestra también por no ser claros en lo que haremos y para qué lo haremos, además de explicitar su impacto en el ‘core’ y negocio de la organización.
Otra vez, gracias por compartir. Abrazoooo
¡MAX!
Gracias por participar en la conversa, desde siempre.
Con lo que comentas surge la típica pregunta: “¿Qué fue primero: el huevo o la gallina?” Al final un profesional preparado, con visión, actualizado y con experiencia en algún momento encontrará o propiciará la oportunidad para aportar/influir como debe ser.
Pasa igual cuando somos consultores, algunos clientes aprovecharán el servicio más que otros y potenciarán en gran medida su negocio, en comparación con otros que contratan, pero subestiman lo que se les propone.
Un abrazo. Sigamos conectados.
Hola, Gabriel. Muy acertado tu enfoque. Si bien “los verbos escribir, editar, ejecutar, investigar y publicar” son la base de nuestra carrera (Comunicación Social en cualquiera de sus especialidades), no debemos desdeñar “verbos como diagnosticar, estrategizar, planificar, gerenciar, impactar, transformar, persuadir, analizar, capacitar, asesorar” y agregaría intuir, simplificar, colaborar, que si bien parecieran de perogrullo, no siempre se tiene en cuenta.
Algunos comunicadores, sobre todo si han ejercido el periodismo, les cuesta asimilar la gerencia en términos de ese “integralizarnos” al que te refieres.
Estamos viviendo una era de hipercomunicación y, paradójicamente, los comunicadores no nos hemos convertido en los profesionales más buscados porque se piensa que cualquier ciudadano o ciudadana, con acceso a las nuevas tecnologías y un curso express, puede comunicar, asesorar y generar contenidos.
Si bien en la variedad está el gusto, en la calidad está la diferencia y en la formación la excelencia.
Querida Aless gracias por participar en la conversación en todos los espacios posibles. Me hace muy feliz siempre contar con tu apoyo y punto de vista. Esta frase -con la que cierras- está para hacer murales, tatuajes y millones de tuits: “la calidad está la diferencia y en la formación la excelencia”.
Un abrazo, sigamos compartiendo.